Crisis fronteriza: ¿cuáles son las opciones?

En medio de un repunte y cambio en los flujos migratorios hacia Estados Unidos, se observa una falta de abordaje integral y soluciones a largo plazo. En lugar de ello, surgen propuestas para “endurecer” políticas y “cerrar” fronteras, destacando un enfoque preocupante.

El Partido Republicano, liderado por Donald Trump, adopta una postura antiinmigrante extrema, calificando a los inmigrantes como quienes «envenenan la sangre» del país. Mientras tanto, los demócratas muestran inquietudes sobre el impacto electoral del tema, marcando una división partidista que influye en la discusión migratoria.

Angela Kelley, asesora de políticas para la Asociación de Abogados de Inmigración, resalta las complejidades en las negociaciones del Senado, donde se busca financiamiento para Ucrania y otros fines. Este contexto político afecta directamente las discusiones sobre inmigración.

Asilo y sus solicitantes

“Tenemos retrasos de 6, 7 y 8 años para las personas que solicitan asilo. ¿Por qué es esto importante? Porque si eres un solicitante de asilo legítimo y lo estás afrontando con muchas dificultades, en 7 años tu caso quedará obsoleto”, dice la vocera.

Agrega que los testigos no estarán allí. “No podrás demostrar que realmente fuiste perseguido. Y entonces esa persona no va a ganar la asignación”.

Sin embargo, otras personas que no tienen un caso ganador seguirán con sus vidas, “Esperan esos 7 años y luego se los niegan. Pero ya se casaron, tuvieron hijos, etc.  Hacen lo que todos hacemos. Entonces, ¿ahora qué hacen? ¿Retirarse?

Para Kelley esto funciona básicamente como una puerta de entrada. “Que la gente entre y se quede el mayor tiempo posible. Y eso ha sido así durante mucho tiempo. Pero ahora las solicitudes han aumentado significativamente”, lo cual genera nuevas preguntas y obliga a nuevas respuestas.

Causas de la migración

Vanessa Cárdenas, directora ejecutiva de America’s Voice, subraya la compleja realidad que enfrenta la región, incluyendo migración sin precedentes debido a países fallidos, impactos económicos del COVID-19, inestabilidad gubernamental y cambio climático. Añade que el Partido Republicano utiliza la inmigración como táctica organizativa en lugar de buscar soluciones.

“Nuestra región enfrenta nuevamente, una migración sin precedentes debido a los países o los gobiernos fallidos, lo cual es definitivamente un factor. También tenemos una especie de resultados de COVID, Lo que creó estragos económicos en la región y puso en peligro a tanta gente bajo inestabilidad económica”.

Señala que la otra pieza es el cambio climático. “Estoy tratando de explicar que no es solo que nuestro sistema está completamente obsoleto, sino que también hay presiones regionales, presiones globales que han cambiado los patrones migratorios”.

¿Pro-inmigrante?

Esmeralda Flores, Gerente de Políticas de la organización de derechos humanos para migrantes CHIRLA, aporta una perspectiva pro inmigrante, destacando la contribución positiva de esta comunidad a la economía, según investigaciones independientes. Sin embargo, reconoce la necesidad de límites y un proceso regulado para la inmigración, abogando por criterios y requisitos claros.

Flores acepta la necesidad de establecer límites en el proceso migratorio. Aunque aboga por la importancia de destacar el valor de la inmigración, también subraya la importancia de un enfoque regulado.

Ambas perspectivas resaltan la necesidad de considerar los aspectos económicos, políticos y humanitarios en las discusiones migratorias. “Mientras la política se entrelaza con la realidad de la migración, queda claro que abordar estos desafíos requerirá un enfoque equilibrado y comprensivo”, señala.