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La Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas manifestó este viernes su consternación tras la noticia de que el líder opositor ruso, Alexei Navalny, falleció en prisión.
A través de un comunicado, la oficina recordó que habían «planteado repetidamente graves preocupaciones relacionadas con los cargos contra Navalny y su detención reiterada, que parecía ser arbitraria».
Navalny llevaba en prisión desde enero del años 2021, cuando fue detenido en la ciudad de Moscú. Anteriormente pasó semanas hospitalizado por envenamiento.
La oficina aseguró que «si alguien muere bajo custodia del Estado, la presunción es que el Estado es responsable», y esa posibilidad «solo puede ser rebatida mediante una investigación imparcial, exhaustiva y transparente llevada a cabo por un órgano independiente».
Por ello, hicieron un llamado a las autoridades rusas a garantizar que se lleve a cabo una investigación transparente sobre el hecho.
Fuente: news.un