Nuevo centro de Movilidad Segura en México también recibirá solicitudes para migrantes de Centroamérica
El nuevo centro de procesamiento de solicitantes de refugio en México -todavía por ser instaurado- aceptará a venezolanos, haitianos, cubanos y nicaragüenses; pero también otorgará visas de trabajo a ciudadanos de países del Triángulo Norte de Centroamérica (Guatemala, Honduras y El Salvador)
El gobierno de Estados Unidos anunció el viernes que prepara, de conjunto con México, la instauración de un centro internacional para la recepción de refugiados de Venezuela, Cuba, Nicaragua y Haití en el sur de la nación azteca, y que el mismo podrá ofrecer también visas laborales a migrantes del Triángulo Norte de Centroamérica (Honduras, Guatemala y El Salvador).
“Vamos a procesar a nacionales de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela para nuestro programa de refugiados y el gobierno de México ha indicado que va a poner a disposición visas laborales para ciudadanos migrantes del Triángulo Norte”, informó el subsecretario del Departamento de Seguridad Nacional de EEUU (DHS, por sus siglas en inglés), Blas Nuñez-Neto, en intercambio telefónico con reporteros.
El nuevo programa fue anunciado el pasado 28 de julio, con la premisa de que los solicitantes lo hagan en los países por donde transiten en la región por medio de la aplicación electrónica CBP ONE.
Ante el aumento significativo de inmigrantes en situación irregular que se acumulaba hace unos meses en la frontera sur con México, la Casa Blanca anunció la instauración de centros para el procesamiento de migrantes en las denominadas Oficinas de Movilidad Segura.
Estas oficinas están destinadas a procesar solicitudes de refugio a venezolanos, nicaragüenses, cubanos y haitianos, en Guatemala, Costa Rica y Colombia.
El nuevo centro de procesamiento anunciado por Núñez-Neto no tiene fecha precisa para entrar en funcionamiento, sin embargo el funcionario acotó que «todos los detalles se están trabajando en el día de hoy».
Desde octubre del año 2022, el gobierno del presidente Joe Biden abrió un proceso de parole humanitario para que pudieran acogerse a él solicitantes de refugio de Venezuela. Luego lo extendió a ciudadanos de Cuba, Nicaragua y Haití, distribuidos en unos 30.000 mensuales entre las cuatro naciones, y éstos están obligados a hacer tales solicitudes en los países por donde transiten, o se les impedirá tramitar su caso.
A pesar de que los cruces irregulares en la frontera sur de EEUU se han desplomado tras la implementación de las últimas medidas migratorias de la Administración Biden, pero teniendo en cuenta el reciente aumento de cruces por el peligroso Tapón de El Darién -ubicado en la selva entre Colombia y Panamá-, este viernes Núñez-Neto recalcó: «seguimos insistiendo a los migrantes, particularmente a los venezolanos que si entran de manera ilegal a Panamá no van a ser elegibles para este proceso de parole humanitario».
Según datos de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), y que fueran resaltados el jueves por el portavoz adjunto de Naciones Unidas, Farhan Haq, unas 250.000 personas han cruzado a pie el peligroso tramo de El Darién en los últimos siete meses de 2023, lo que, afirman, es un aumento significativo en relación con el mismo periodo del año anterior.
En alusión al funcionamiento de su política migratoria actual, el funcionario agregó que desde la instauración del parole humanitario como vía para reforzar la inmigración legal y ordenada, EEUU ha admitido a más de 150.000 aplicantes, de ellos 50.000 de nacionalidad venezolana.
Ante la afirmación de los traficantes de personas de que EEUU habría dejado de expulsar a miembros de grupos familiares al llegar a la frontera sur con México y no habría consecuencias, el funcionario alertó que «nada ha cambiado» . Incluso destacó que el número de inmigrantes miembros de familia devueltos ha ascendido a 1.000 en la últimas semana, «lo que constituye un récord».