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Según el director ejecutivo de Capital Humano Social y Alternativo, Ricardo Valdés, la migración irregular y la desaparición de personas representan los grupos más vulnerables para los traficantes de personas en Perú.
La información del Ministerio Público de Perú detalló que, en los últimos 8 años, la cifra de personas migrantes que han sido afectadas por la trata de personas en el país aumentó en más de 500%, de las cuales, el 85% de víctimas extranjeras fueron de nacionalidad venezolana.
Asimismo, las cifras de la Policía revelan que en el año 2022 desaparecieron más de 18.000 personas (61% eran mujeres y el 55% niñas, niños y adolescentes).
Estos datos trascienden en el marco del Día Mundial contra la Trata de Personas, actividad criminal que ocupa actualmente la segunda economía ilícita más lucrativa en Perú, ya que moviliza más de 1.300 millones de dólares al año.
De acuerdo con la investigación Las Economías criminales y su impacto en el Perú, se estima que en el país los grupos delictivos obtienen 28.875 soles anuales por cada víctima de trata de personas.
«Ante esta preocupante realidad, se requiere de manera urgente de una política con los recursos económicos necesarios para solventar los servicios de persecución y prevención del delito, así como para la atención y reintegración de las víctimas», señaló Valdés.
«Los tratantes y explotadores aprovechan estas condiciones de precariedad económica, el desconocimiento de las leyes, la situación irregular de las personas o la ausencia de redes de apoyo, para convertir a miles de personas, especialmente mujeres y niños, en las víctimas perfectas de estas redes de explotación», agregó.
En este sentido, CHS Alternativo hace un llamado a las autoridades para tomar acciones y seguir luchando contra esta forma de explotación humana.
Fuente: CHS Alternativo