Covid: ¿realmente terminó la pandemia?

Una nueva subvariante de Covid-19, conocida como Arcturus, está surgiendo cuando se da por finalizada la emergencia de salud pública nacional, eliminando así varias redes de seguridad críticas.

Arcturus fue identificado por primera vez en India, y ha aparecido en otros 29 países. En Estados Unidos representa hoy alrededor del 6% de las nuevas infecciones por Covid.

La Organización Mundial de la Salud señala que Arcturus tiene una mutación más en la proteína espiga que la variante predominante XBB.1.5, que puede hacerla más infecciosa. Otras observaciones indican que un síntoma de la nueva subvariante es la conjuntivitis.

¿Cuál es el camino a seguir? En una rueda de prensa, tres expertos analizan la eficacia de los tratamientos actuales y lo que significa realmente el llamado “fin de la emergencia de salud pública”.

Parecida, pero no igual

El doctor Robert Wachter, profesor jefe del Departamento de Medicina de la Universidad de California en San Francisco percibe que el Covid está relativamente suave y estable en los últimos 18 meses. “La sorpresa es la falta de sorpresas. No han cambiado las reglas del juego”, agrega.

Cree que los cambios más grandes son políticos y sociales, ya que las restricciones se han acabado, salvo la necesidad de máscaras en los médicos para ver a los pacientes. “Incluso los referzos son electivos”, recuerda.

También aprovecha para recordar que las vacunas y los refuerzos siguen funcionando, al igual que las pruebas caseras.

Dice que la vida ya se parece mucho a la de 2019. Recomienda ponerse la máscara en aviones o en sitios con mucha gente. “Se debate si es correcto o no, pero las hospitalizaciones son bajas”, razona.

Agrega que parece que la nueva Arcturus produce más fiebre y conjuntivits. “Es una respuesta inflamatoria, no sabemos por qué pasa”.

Entre sus observaciones, relata que no se han visto reportes de consecuencias a largo plazo, aunque parece más frecuente en niños.

El especialista siente que en el último año las variantes son “miedosas”. Afirma que “Si con la nueva subvariante las cosas cambian, ya tomaremos las medidas”.

Covid de largo plazo

La gente ve que el riesgo es menor, pero no calibran que tampoco es cero. “Consideran solamente el riesgo de muerte, pero recuerden que también hay síntomas de enfermedades del corazón o disminución cognitiva”.

Compartió que su esposa tiene síntomas del llamado Covid largo. Lleva un año con ellos. “A la una o dos de la tarde necesita tomar una siesta, algo que no hacía antes de la enfermedad. Sus funciones intelectuales están más lentas. Tiene 65 años y puede ser por la edad, pero lo cierto es que antes del Covid ella era muy distinta”, relata.

Sin embargo, adelanta que las consecuencias a largo plazo de las infecciones virales no son nada nuevo. Puede suceder con la influenza y otras dolencias.

“Sigo siendo cuidadoso donde el riesgo es más alto. ¿Por qué no ponerse una máscara?” Wachter también cita que los médicos usan mascarilla por 10 horas al día y no han observado problemas al respecto.

También informa que se ven menos casos de los llamados “eventos superdifusores”, como la reunión de 50 escritores donde aparentemente se contagió su esposa.

El doctor Wachter recibió recientemente el refuerzo adicional y considera que los beneficios sobrepasan los riesgos. No es para nadie menor de 65 años, a menos que tengan algún riesgo inmunológico.

Hmosa aprendido que las mujeres tienen dos veces más riesgo que los hombres, asi como el peligro de la edad,

Para disminuir los riesgos hay que estar vacunado. Si no lo estás, las probabilidades de desarrollar Covid son de 1 en 10, mientras que con vacuna son 1 en 20. Igualmente, el riesgo de reinfectarse después de haberlo sufrido se cortan a la mitad.

Poblaciones en riesgo

En Estados Unidos aún fallecen doscientas a trescientas personas al día, según alerta el doctor William Schaffner, profesor jefe del Departamento de Medicina Preventiva en el Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt.

Sin embargo, recuerda que “Nuestra inmunidad de población es muy superior a lo que era hace un año. Muchos de nuestros habitantes ya han sufrido el Covid, lo que hace el nivel de protección muy alto”.

Coincide en que la probabilidad de enfermarse es baja y solamente afecta a gente mayor o sin vacunarse. Actualmente se está hospitalizando a gente que no se vacunó, o de edad avanzada. A las personas mayores, el doctor Schaffner recuerda que son elegibles para refuerzos, pero apenas un 45% de las personas mayores de 65 años han utilizado este beneficio.

Predice un refuerzo actualizado, junto a la vacuna de la influenza, para personas mayores. “Ya veremos en este otoño”, complementa. Sugiere permanecer alerta ante las nuevas vacunas y posibilidades de protección.

Apunta que quienes han padecido el virus deberán esperar 4 meses antes de recibir un refuerzo; pero tienen el beneficio de la llamada “inmunidad híbrida”, de quienes fueron vacunados y también se enfermaron. “Es la protección más fuerte que se puede tener”.

Niega que el uso de mascarilla pueda tener alguna consecuencia negativa, aunque reconoce que puede resultar difícil para quienes padecen dolencias respiratorias.

Visión a largo plazo

Para el doctor Benjamin Neuman, profesor de Biología y Virólogo Jefe del Complejo de Investigación de Salud Global de la Universidad Texas A&M, hay que tomar en cuenta tanto las variables del virus como del afectado. “Arcturus es tan distinto a Omicron como Omicron a Delta”, agrega. Por todo ello, los ecenarios predictivos pueden ser imprecisos.

Sin embargo, aporta una sentencia lapidaria: “Los condones previenen bebés y las máscaras previenen infeccioes respiratorias”.

Lamenta que el financiamiento de las vacunas haya sido restringido a nivel nacional. “Es muy costoso probar y sacar una vacuna”, razona.

Revela que los comités de la Administración de Alimentos y Medicamentos o FDA que lidian con esto, por mucho tiempo hablaron solamente de Covid. Ahora también lo hacen de influenza, se reúnen cada dos meses y lo harán en mayo. Allí cubrirán las nuevas variantes. “No es un paso muy rápido pero al menos es un paso”, señala.

Neuman recomendó vacunar a la población. Sin embargo, confesó que no tiene confianza en que las vacunas los protegerán de las nuevas variantes.

“Esperaba que las vacunas pudieran ofrecer inmunidad a largo plazo, pero creo que eso no va a suceder, porque es un virus que cambia constantemente”, finalizó.