Rocinha busca atraer turismo mostrando su mejor cara
La favela más poblada de Brasil, controlada por un grupo armado; que intenta mostrar un lado diferente a visitantes llegados de todas partes del mundo
Un guía local advierte en un tramo del recorrido: “aquí apagar los teléfonos, no grabar ni sacar fotografías”. A unos pasos, un hombre camina con un arma larga a la vista de todos por un empinado callejón de la favela de Rocinha, la más poblada de Brasil, controlada por el narcotráfico.
Unos turistas se sacan fotos con un influencer que tiene más de un millón de seguidores en Instagram. Todo ocurre en medio de una visita guiada.
“La realidad de la favela no es la que nos quieren mostrar muchas veces; que es peligroso, no. Hay gente buena, gente amable, niños con sueños, por eso se da este tipo de turismo, para mostrarle a la gente que aquí es tranquilo, que aquí no es peligroso”, explica a la Voz de América Juan Gabriel Velázquez, un colombiano que vive del turismo y excursiones a Rocinha desde el año 2019.
Rocinha es una famosa barriada que creció enclavada en un cerro ubicado entre São Conrado y Gávea, – dos de las zonas más adineradas de Río de Janeiro-, con vista privilegiada a las famosas playas de Ipanema y Copacabana.
Allí la infraestructura es precaria. Los cables de electricidad asemejan telarañas que se extienden por callejones, donde el olor a humedad no da tregua. El acceso a servicios básicos como el agua, es limitado. Las paredes tienen grafitis con mensajes y reglas que se deben cumplir.