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Los costos funerarios en Nicaragua están fuera del alcance de muchos

En Nicaragua los costos de los servicios funerarios están fuera del alcance de muchos. Algunos optan por pagar los servicios a cuotas. El gobierno ofrece un subsidio pero muchos que fallecen no han pagado las cuotas. El gobierno entrega ataúdes a familias pobres.

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Un ataúd en Managua, capital de Nicaragua, donde reside al menos una sexta parte de los 6 millones de habitantes del país, puede costar entre 300 y 3.000 dólares.

El costo de la preparación de un cuerpo oscila entre 50 y 150 dólares. En algunas funerarias se rentan salas velatorias que cuestan entre 300 y 650 dólares, depende de la cantidad de personas, dijeron cuatro funerarias consultadas.

Los precios son altos con respecto al salario mínimo en Nicaragua, calculado entre 144 y 323 dólares. Pero para los trabajadores de la economía informal, son a menudo prohibitivos.

Solo el 22% de la población económicamente activa en Nicaragua mantiene empleos formales, según un informe del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS).

Rodolfo Baldelomar, un nicaragüense de 45 años de edad, es un trabajador informal que se desempeña como comerciante. Recientemente tuvo que enfrentar la muerte de un familiar. Tras esa experiencia decidió pagar por adelantado dos féretros, uno para su mamá y otro para él.

“La funeraria que contratamos nos dio la opción de pagar en cuotas”, dijo el hombre a la Voz de América. La cuota es de 50 dólares al mes.

“A la gente no le gusta hablar de ese tema, pero siento que hay que estar preparado para ese momento. Hay que buscar cómo porque, si no, luego te toca andar pidiendo”, agregó. El servicio que compró a plazos cuesta alrededor de 800 dólares. «No es ni el más caro ni el más barato», dijo.

El costo de un lote en un cementerio en Managua ronda entre 60 dólares si es público o hasta 3.000 dólares si es un cementerio privado.

En Nicaragua el Instituto de Seguridad Social otorga un subsidio de sepelio a sus afiliados que va en dependencia del salario mensual del fallecido.

El subsidio de sepelio se paga si un trabajador fallecido tenía al menos cuatro semanas de aportación en las 26 semanas antes de la muerte, de acuerdo con el Instituto de Seguridad Social nicaragüense. El subsidio es igual al costo del funeral o el 50 % del salario mensual del fallecido.

El economista nicaragüense Enrique Sáenz dijo que ocho de cada 10 personas de la tercera edad que fallecen no han estado asegurados, por lo que «no reciben ningún tipo de asistencia de parte del seguro social para efectos de los gastos funerarios».

Puede leer la nota completa aquí en VoA Noticias

 

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