De Venezuela a Colombia, emprendiendo con una sonrisa y una pizza
Freddy no solo ha enfrentado los desafíos habituales de todo migrante, sino que también ha luchado contra el estigma y la percepción negativa que algunos tienen sobre los venezolanos
En noviembre de 2020, Freddy Antonio Guales, junto con su esposa, su hija y su nieto, emigraron a Colombia. Juntos, abrieron un restaurante llamado “Al Capone Pizzas”, que se ha convertido en un éxito en la ciudad de Medellín.
La travesía desde Venezuela a Colombia no fue fácil para Freddy y su familia. Tuvieron que atravesar las zonas clandestinas de la frontera, lo que comúnmente se conoce como “trochas”.
Freddy y su esposa son licenciados en trabajo social, pero también tienen una pasión por la cocina. Aprovechando las habilidades culinarias de su esposa, decidieron emprender en el sector gastronómico. Así nació “Al Capone Pizzas”, un restaurante que se destaca por su alta calidad y buen servicio, por lo que es bien aceptado por la comunidad.
Nueva etapa
Sin embargo, Freddy no solo ha enfrentado los desafíos habituales de todo migrante, sino que también ha luchado contra el estigma y la percepción negativa que algunos tienen sobre los venezolanos. Él y su esposa, a pesar de su edad, han demostrado su compromiso de progresar en esta nueva etapa de sus vidas y superar cualquier obstáculo en su camino.
A pesar de las dificultades, Freddy y su familia se sienten plenos y felices en Medellín. Su enfoque está en hacer crecer su restaurante y establecer nuevas relaciones comerciales. Pero su corazón también está dividido, ya que no pueden evitar extrañar la Venezuela de antaño, una época en la que pudieron estudiar y progresar sin las dificultades actuales.
Al final, Freddy define su situación actual como venezolano en Colombia con una palabra: esperanza. A pesar de las heridas y el dolor, sigue creyendo en un futuro mejor y está dispuesto a trabajar arduamente para alcanzarlo.
Instagram:@alcapone.pizza