Migrantes indios indocumentados en rumbo a EEUU a través de Canadá

En los últimos años, Estados Unidos ha visto un aumento sin precedentes de migrantes indocumentados de la India, la mayoría de los cuales entran a través de México.

Pero a medida que la frontera entre Estados Unidos y México enfrenta una presión cada vez mayor, muchos están recurriendo a un camino menos convencional: cruzar la frontera con Canadá, que es larga y poco vigilada.

En el año fiscal 2023, los agentes fronterizos de EEUU encontraron casi 97.000 migrantes indios indocumentados en todo el país, incluidos más de 30.000 en la frontera norte, frente a los 2.225 de 2021, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).

Las cifras han continuado en gran medida sin disminuir en los últimos meses. Entre octubre y febrero, casi 14.000 indios fueron encontrados en la frontera entre Estados Unidos y Canadá, frente a los 619 del mismo período dos años antes.

La afluencia récord es parte de una avalancha migratoria a través de Canadá que ha abrumado a los funcionarios de seguridad fronteriza y a las comunidades inestables en los estados del norte de Estados Unidos. Los datos de CBP muestran que hubo casi 190.000 encuentros en la frontera canadiense en 2023, más de seis veces el número en 2021.

El fin de la pandemia de COVID-19 ha generado un aumento de la migración mundial. Si bien las personas migran por diferentes razones, los expertos dicen que muchos migrantes se sienten atraídos a Estados Unidos por la apertura percibida de la administración Biden a los solicitantes de asilo.

«En general, la gente está buscando venir a Estados Unidos porque han oído hablar del proceso de asilo aquí», dijo Chirag Patel, un abogado de inmigración con sede en Maryland, que maneja casos de asilo de indios.

Patel y otros expertos dicen que el flujo de solicitantes de asilo a la frontera probablemente se mantendrá a medida que anticipan posibles cambios de política con las elecciones presidenciales de noviembre en Estados Unidos.

«La gente está tratando de conseguir muchas cosas antes de noviembre, pero también obviamente antes de enero, por si noviembre termina siendo a favor de Trump», dijo Patel.

La avalancha de solicitantes de asilo indios que ingresan al país, que alguna vez fue un goteo, muestra el rostro cambiante de la migración no autorizada a Estados Unidos.

«Vienen de todas partes del mundo, literalmente de todo el mundo», dijo Muzaffar Chishti, investigador principal del Instituto de Política Migratoria.

El aumento de la migración india no autorizada ha convertido a los indios en el tercer grupo más grande de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos. En 2021 había unos 725.000 indios indocumentados, más que en cualquier otro país fuera del hemisferio occidental, según un informe reciente del Pew Research Center.

Aunque muchos tienen reclamos genuinos de persecución, los expertos dicen que los solicitantes de asilo indios son predominantemente migrantes económicos, atraídos por la perspectiva de una vida mejor en Estados Unidos.

La mayoría son relativamente acomodados para los estándares indios y provienen de Punjab y Gujarat, dos de los estados más prósperos de la India con una larga historia de inmigración a Estados Unidos.

«Uno de los errores que cometemos es pensar que son los pobres los que migran», dijo Devesh Kapur, director de Programas de Asia y profesor de Estudios del Sur de Asia de la Fundación Starr en la Universidad Johns Hopkins. «Los pobres del sur de Asia simplemente no pueden permitirse el lujo de tomar un vuelo».

Pero aquellos que pueden a menudo carecen de un camino legal hacia Estados Unidos. Las visas de estudiante de EEUU son difíciles de conseguir, y debido a la acumulación masiva de casos de inmigración, una visa de inmigrante puede tardar hasta 20 años en obtenerse.

Eso deja a la «ruta del burro» como la única opción para muchos indios ansiosos por llegar a América. El viaje, a veces peligroso, a través de varios continentes, ampliamente publicitado en las redes sociales, es facilitado por una tarifa considerable por las redes globales de trata de personas.

El costo de llegar a EEUU puede superar los 50.000 dólares, pero incluso un propietario a pequeña escala en Punjab puede pagarlo. Un acre de tierra agrícola en el estado fértil puede tener el mismo precio, señaló Kapur.

Si bien los migrantes indios a menudo toman la «ruta del burro» que consiste en llegar a México para cruzar a EEUU, muchos consideran que Canadá es una opción más rápida y segura, según los expertos.

El politólogo Shinder Purewal dijo que el impulso del actual gobierno canadiense para atraer estudiantes internacionales ha facilitado que los indios obtengan visas.

«Es más fácil obtener una visa para Canadá que para Pakistán», dijo Purewal, quien enseña en la Universidad Politécnica de Kwantlen en Surrey, Columbia Británica.

Hasta hace poco, los indios a menudo se mudaban de Canadá a Estados Unidos cuando no podían obtener la residencia canadiense, dijo Purewal.

«Ahora cada vez más personas están entrando a Canadá, por lo que pueden ir directamente a Estados Unidos porque la economía está mejor, las perspectivas de empleo son mejores allí», dijo Purewal.

La agencia de inmigración de Canadá no respondió a una solicitud de comentarios.

Pero las perspectivas económicas no son la única razón por la que los migrantes indios eligen los EEUU. El apoyo de las comunidades indias establecidas en ese país también influye en su decisión.

Una red de contrabando descubierta recientemente por investigadores estadounidenses transportó a migrantes gujarati desde la frontera canadiense a establecimientos comerciales propiedad de gujarati-estadounidenses en el área de Chicago.

«La gente que llega tiene una forma de venir», dijo Pawan Dhingra, rector asociado y decano asociado de la facultad de Amherst College que enseña estudios de inmigración. «Tienen una conexión con el país. Si sólo se trataba de escapar de la India, podrían ir a cualquier parte del mundo».

A pesar de su reputación de seguridad, cruzar la frontera canadiense ha resultado ocasionalmente fatal para los migrantes indios.

En enero de 2022, una familia india de cuatro miembros fue encontrada muerta congelada en Manitoba, a pocos metros de la frontera con Estados Unidos. En marzo de 2023, los cuerpos de ocho migrantes, entre ellos cuatro indios, fueron recuperados del río San Lorenzo.

Maureen Silcoff, abogada canadiense de refugiados e inmigración, dijo que los riesgos extremos que corren los migrantes muestran su extrema necesidad de huir de las dificultades.

«La gente no simplemente recoge y deja sus hogares, sus comunidades, sus familias, sus trabajos por la sensación de querer una aventura emocionante», dijo Silcoff en una entrevista. «La gente se desespera y, a veces, la gente es objeto de abusos muy graves contra los derechos humanos, y tratan de aliviar ese tipo de problemas y otras dificultades trasladándose a otro país».

La embajada india en Washington no respondió a una solicitud de comentarios.

Fuente: VoA Noticias